En resúmen; 25 años
Pasan los años y comenzamos a entender el por qué de nuestras acciones, nos damos cuenta de aquellas cosas que solíamos hacer por diversión y ahora parecen arriesgadas o simplemente sin sentido. Recordamos las acciones que cambiaron nuestra vida para bien o mal.
¨Recordar es vivir¨ y podemos estar seguros que las acciones realizadas fueron con pleno uso de nuestra razón, es decir no debemos arrepentirnos de sucedido, sino entender y aprender de ello.
Estos 25 años de existencia me han dejado enormes cofres de tesoro llenos de recuerdos, experiencias que para bien o mal dejaron huella en mi vida, incluyendo cicatrices en la cara para aquellos que me conocen. Y estoy feliz de haber llegado hasta esta parte del recorrido entusiasmado por saber qué me depara el destino, buscando tiempo para comprender mi presente.
El día desde el inicio fue diferente:
Desperté en medio de cordialidad por los abrazos de mi familia, sabía que era un día especial. Transcurrió un tanto extraño como debía ser, junto a dos amigos buscando tepalcates a ras de suelo, hacíamos hoyos para encontrarlos con la sorpresa de que encontramos obsidiana al llegar más abajo.
Es increíble cómo en esta ciudad con un pasado prehispánico tan hermoso, podemos encontrar esta clase de cosas y que sólo algunos se den cuenta de la maravilla en la cual vivimos.
La abuela de un buen amigo nos contaba que hacía lo mismo con sus hermanas; encontraban pequeños pedazos de vasija y otras figurillas llevándolas a su casa a limpiarlas para descubrir su hermosura. Decía que en el pasado abundaban toda clase de plantas medicinales en las calles (hasta la marihuana). Hoy en día podemos encontrar floripondio (planta que produce efectos psicoactivos en quien la bebe) en algunas colonias de la ciudad.
El día continuó y dieron las tres de la tarde, hora de llegada de los invitados más especiales para mí. Entraron con una expresión sonriente dispuestos a celebrar conmigo un año más de vida.
Al comer y convivir nadie podía ocultar en su rostro una feliz expresión de gula y de estar completamente satisfechos con el ambiente y la rica comida. Gracias a los presentes.
Con ésto podemos ver cómo en ocasiones el pasado influye en nuestro futuro.
Pero ¿qué sería de nuestros sueños si no pudiéramos recordar?
Por alguna razón estamos aquí, vivimos en donde estamos y lo que sentimos; saber que siempre habrá lugares, cosas, personas para recordar y darnos cuenta lo especial de nuestro pasado que nos impulsará a vivir un presente lleno, para en el futuro recordar con el mismo entusiasmo nuestra historia.
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