Hace tres años al entrar a la Universidad veía a mis compañeros mas grandes y pensaba lo bien que se sentiría acabar la Universidad y emprender ese camino a la madurez; y cual niño que quiere ser adulto lo más rápido posible, nunca pensé que lo que debía hacer era difrutar del momento y aprender todo lo que pudiera darme armas para mi futuro. Pasó el tiempo y solo con los golpes que sabe dar el tiempo, fui entendiendo lo importante que era pasar por esa etapa, lo importante que era conocer gente diferente a mi, pero al mismo tiempo iguales para que pudieran ayudarme a seguir mi camino para desarrollarme de la mejor manera. Conocer otros horizontes fue fundamental en esta larga etapa que acaba de concluir, abrirse a otras personas fue ideal para conocer los maravillosos mundos en los que viven y aprender de ellos fue aún más interesante.
Un círculo más se ha cerrado en mi vida y con él también se cerró un ciclo de entrenamiento para enfrentar lo que venga, cuando sea y en donde sea. Las herramientas que ahora tengo no se comparan con nada, las amistades que ahora tengo son como una hermandad indisoluble, con las cuales en un futuro podré disfutar de sus éxitos así como inegablemente de los mios. Los forjadores de mis conocimientos obviamente fueron indispensables, ya que sin ellos no podría tener la fuerza mental con la que cuento ahora, una fuerza que no se compara con nada y que brinda seguridad en cada paso que daré por el resto de mi vida.
De repente y más rápido de lo que pensaba llegó el dia en que festejaríamos el fin de nuestras aventuras como universitarios y camaradas, la culminación de algo grande, que mejor que hacerlo junto a nuestras familias, que incansablemente estuvieron a nuestro lado en cada momento sufrido y gozado.
En lo particular me pareció una ceremonia digna de ser comentada a mis nietos, bisnietos y demás que aparezcan en mi vida, contarles como conocí y aprendí de personas que realmente valen la pena, el como me hice grande en medio de un caos en el que se encontraba mi vida. Todo fue como un sueño hecho realidad, un sueño que obviamente estaba predestinado a susceder. En la realización de ese sueño convivieron todos mis seres queridos, amigos, amigas, familia y ese ser tan hermoso que hasta este momento ha sabido amarme y entregarse, para tí va un enorme agradecimiento y las más sinceras palabras de amor. Lo siento.
Los momentos vivídos en esa ceremonia me mostraron lo que era capaz de hacer, pues podia voltear a mi alrededor y observar tanta felicidad mezclada por diferentes lados, toda esa felicidad era generada por una meta la cual mis compañeros y yo habíamos logrado y además, habíamos sabido generar.
Un comienzo espectacular, una cena digna de esa clase de celebración, videos que nos remontaron a epocas sagradas, una premiación que sólo nosotros podíamos recibir y un ambiente especial, fueron algunos de los elementos que formaron esa grandioza noche y que quedará marcada para el resto de mi vida.
Ahora sólo queda el recuerdo y la nostalgia, de un lugar que no aparecerá de nuevo, pero que al brindarme su enseñanza y experiencia hicieron de mi una persona digna de ser recordada y que sin duda luchará hasta el fin por sus vlores, idelaes y pensamientos, que afortunadamente podrá expresarlos medinte la publicidad.
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